Ir al contenido principal

La pedagogía, lo retro y el compromiso

La pedagogía según el Diccionario de la Real Academia Española es la ciencia que se ocupa de la educación y la enseñanza.
Después de ahondar entre el baúl de recuerdos y mi almacén de datos cerebral, vino a mi mente una frase que mi padre me decía siempre que no encontraba la salida a mis problemas o cuando había dejado de lado los consejos que me daba: ¿vives para existir o existes para vivir? En definitiva siempre me quedé con la segunda opción y a partir de ello me he dedicado a disfrutar todo lo que hago.
¿Qué tiene que ver la pedagogía con lo que mi padre me decía? Es muy sencillo. La frase que el acuñó y que siempre me dijo tenía mucha relación con su forma de actuar y de ver la vida. Entonces a partir de que el me entregó diversas herramientas para defenderme a lo largo de la vida, entendí que mi misión era retransmitir esos conceptos en fondo y forma con aquel que lo necesitara.
Pasado el tiempo tuve y tengo la oportunidad de combinar mi actividad profesional en el periodismo con el servicio docente.
En el primero, tengo que estar atento ante los acontecimientos vigentes durante el proceso de edición del quehacer periodístico de los reporteros gráficos y escritos con los que trabajo. En el segundo, la responsabilidad es mayor por la razón de que mi trabajo defiende a mi persona y habla de mí siempre que este tenga una repercusión (y siempre la tendrá). Lo más importante de mi labor en ambos casos es que son complemento el uno del otro y no da lugar a representar una dicotomía en cuanto a mi disciplina laboral.
Es cierto que la labor es distinta en cada caso pero hay un vínculo que las une invariablemente: la investigación y la capacitación.
Investigar y capacitarse nos hace profesionales más ubicados y conscientes de las necesidades personales y las de nuestro alrededor. Si bien no todos tenemos la fortuna de combinar labores, si podemos generar más conocimiento a partir de lo que se lee, escucha o se ve, tenemos tecnología que cada vez simplifica más el manejo de la información y lo más importante; nos da la oportunidad de manejar los contenidos con estructuras más claras y definidas, ancladas a una realidad más operante para todos los seres humanos.
Los libros dejaron de ser un montón de hojas llenas de letras para alinear conciencias. Ahora, llamados e-books en Internet, contienen las mismas letras (muchos de ellos son 'copia' fiel del impreso) pero en la web tienen la particularidad de que por la rapidez con la que podemos tomar una sección del libro, llegamos a asociar textos on line con 'códigos' estructurales que nos permiten asimilar la utilidad práctica de la pedagogía. Ese intercambio de datos 'enseña' a todos aquellos que comparten experiencias (entendido como conocimientos) en foros, chats, redes sociales, blogs y todos los soportes de la Internet que la base del conocimiento está en compartir experiencias para que los otros reciban un mensaje claro y contundente cada que requieran de informarse, instruirse y fortalecer sus experiencias, que a la larga le serán de una utilidad más que práctica ya que estaremos acostumbrados a dar solución a las tareas que se nos encomienden. Entonces, ¿cumple todo esto una función pedagógica?, ¿educa y enseña? Si su respuesta fue sí, déjeme decirle que vamos de gane y si fue no, entenderé que la pedagogía 'alecciona ciegamente' y no promueve la construcción de una realidad crítica bajo un método científico.
Las experiencias educan a quien las vive, las expresa y hasta las cuestiona. Definitivamente la educación tiene que ver con la ética, la moral y los valores pero eso se nos ha olvidado, creemos que las buenas notas son "La buena educación" y eso sólo es una verificación cuantificable de que se ha comprendido y entendido el mensaje de maestro a alumno pero la verdadera educación está en la huella que dejamos, en el método. Una vez aprehendido este método podemos decir que la pedagogía ha cumplido su función y junto con ella nosotros hemos entregado a un estudiante-profesionista que por lo menos tiene claro en donde habrá de ocupar las herramientas que le hemos entregado y mejor aún, sabrá buscar y detectar las que le hagan falta.
Esto también tiene que ver con el "a dónde" y el "como" por el que pasan todos los egresados de una carrera. Las tendencias retro a veces nos ayudan a recordar de donde venimos y hacia donde vamos (y si no habrá que ver a los pumas que vencieron con mucho corazón al América).
Esta 'tendencia Retro' no es otra cosa más que reinventarse y hacer un recuento o 'flashback' de lo que hacemos bien y lo que nos falta por mejorar.
El compromiso es la suma de la pedagogía y lo retro. No podemos enseñar lo nuevo sin antes recurrir a la historia. No podemos por nada del mundo cambiar un concepto de las cosas y las personas porque ya tenemos una experiencia previa con ellas (dependiendo del caso y la circunstancia de ese momento). No podemos dejar de apoyar causas que en un momento las vimos como procesos fructíferos o como una oportunidad evolutiva, quien así lo hiciese entonces no ha asimilado 'su pedagogía', sólo se limita a lo retro porque lo(a) deja en zona de confort y por lo tanto será más fácil (más no sencillo) sobre llevar su vida justificando que "todo tiempo pasado fue mejor".

Comentarios

  1. Ya no me has leigo gacho visitate punto de fuga, http://puntodefugamx.blogspot.com/

    ResponderEliminar
  2. Te felicito por compartir

    Magda

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Nubes (la luz al final del túnel)

“Parecemos presos y como presos pensamos escapar uno del otro y cometer la fuga” versa el poema Caifán “Nubes”.  En este momento en el que una pandemia nos transformó y una creciente violencia en México que parece no tener fin nos aterra, técnicamente deberíamos ser más solidarios y conscientes de que cada uno de nosotros tiene una batalla por biblioteca día a día. Hay quien tiene empleo pero no es remunerado de acuerdo a sus tareas y capacidades; hay quien no lo tiene y lo está buscando, hay otros que aunque no lo tienen no les interesa buscarlo lamentablemente, es cuestión de perspectivas. También es cierto que en estas circunstancias hay quienes ven oportunidades y quienes sienten que se hunden a pesar de que hacen diferentes esfuerzos para salir a flote. Este tiempo debe servirnos para aprender a pensar, estar abiertos a las ideologías iguales o diferentes a las nuestras pero que en los dos casos suponen un crecimiento de nuestra sociedad. Hay quien aun no se repone de la muert...

Adiós con clase

Son las 10 de la mañana, hora de dar el último sorbo a mi café. Saco de mi portafolio el material de clases; recuerdo que un día como hoy llegué a estos espacios a mostrar mis habilidades y conocimientos para arropar a nuevas generaciones. Entro al aula como tantas veces pero se que será una de las últimas veces que te vea. ¿Será?. Cincuenta minutos. Tres mil segundos para generar la confianza de que todo es posible. Una hora menos diez minutos que se va como el agua. ¿Qué quería? Que lo entendieras, ¿qué buscaba? Que lo tomaras en cuenta, ¿qué logré? Sólo alejarte. Bien lo decía “El Mono” cuando me veía “desenfocado” como aquella mañana que estábamos parados a las afueras de la extinta automotriz que ahora es un casino: ‘Allá afuera está la vida’. Y le hice caso. De momento no sabía que rumbo llevaba pero confiaba, entendía e iba logrando peldaño a peldaño creer en mí como quise que tu creyeras en ti. El destino te trajo aquí, nos cruzó aquí. En algún texto perdido de mis ta...

Único

Ella siempre ha sido parte de Yo, una mujer excepcional. Esta historia comienza con un hombre al que llamaremos "Yo" y una mujer a la que llamaremos "Ella". Yo, es un apasionado de la lectura, un hombre de complexión media, cabello largo y de ideas claras. Entre sus convicciones están que "los enanos no crecen" y ser un "extremo izquierdo pegadito a la banda". La historia se centra en una etapa de despegue de Yo. Corre el año 2006, mayo, un mes muy importante para Yo no sólo por el Día de las Madres. Sabía que en ese mes hacía ya 47 años, en el seno de una familia de origen humilde, había nacido el héroe que lo impulsaba a diario, el primer maestro que le instruyó en el andar por la vida. Mejor conocido en su pueblo natal como Beto, un hombre entregado a sus raíces y a su pasión por la música, ese maestro siempre estuvo al tanto de Yo. En los primeros detalles que tuvieron que ver con las convicciones de Yo, Beto estaba presente. Le incul...